Seguidores

jueves, 30 de noviembre de 2017

LA PERSONA QUE SUEÑA

LA PERSONA QUE SUEÑA


“… El hombre que sueña quiere resistir, pero el

miedo es más fuerte, y allí no hay nadie
a quien tuviese que mostrar valor…”
José Saramago


Entre el sueño y el miedo discurrimos por el tiempo, necesitados del ánimo, del empuje o de la comprensión, que no siempre se tienen cerca.

A veces hay que renunciar a ciertas personas, no porque no te importen, sino porque tú no les importas a ellas... y siempre...  son las que menos esperas, las que más necesitarías.

Y así, entre sueños, miedos y carencia de ayudas hay que seguir naciendo cada día y discurriendo por ese tiempo que adquiere un valor especial, porque no quieres medir ni en pasado ni en futuro, porque solo el presente tiene valor.

No es fácil y se hace realidad e mensaje que esconden estos versos:


EL INSTANTE

¿Dónde estarán los siglos, dónde el sueño
de espadas que los tártaros soñaron,
dónde los fuertes muros que allanaron,
dónde el árbol de Adán y el otro Leño.

El presente está solo. La memoria
erige el tiempo. Sucesión y engaño
es la rutina del reloj. El año
no es menos vano que la vana historia

Entre el alba y la noche hay un abismo
de agonías, de luces, de cuidados; 
el rostro que se mira en los gastados

espejos de la noche no es el mismo.
El hoy fugaz es tenue y es eterno;

otro cielo no esperes, ni otro infierno.

No hay comentarios:

Publicar un comentario