POR LA PAZ

POR LA PAZ

¡Paz, paz, paz! Paz luminosa.

Una vida de armonía sobre una tierra dichosa.”

Paz sin fin, paz verdadera.

Paz que al alba se levante 

y a la noche no se muera.”

1. Rafael Alberti. 

Ayer mismo realicé una entrada posicionándome sobre la paz desde uno de los múltiples puntos de vista que pueden hacerse. Hoy quisiera poner un poco de poesía a la pobre prosa de ayer y lo hago de la mano de algunos de “mis” poetas”.  Esta entrada, pues, no tiene más significado que el de “colorear” lo dicho y, seguro, dar el sentido que mi entrada no tenía.

2. Pido la paz y la palabra Blas de Otero 

Aquí tenéis, en canto y alma, al hombre 

aquel que amó, vivió, murió por dentro

y un buen día bajó a la calle: entonces 

comprendió: y rompió todos sus versos. 

Así es, así fue. Salió una noche 

echando espuma por los ojos, ebrio 

de amor, huyendo sin saber adónde:

a donde el aire no apestase a muerto.

Tiendas de paz, brizados pabellones, 

eran sus brazos, como llama al viento; 

olas de sangre contra el pecho, enormes 

olas de odio, ved, por todo el cuerpo.

¡Aquí! ¡Llegad! ¡Ay! Ángeles atroces 

en vuelo horizontal cruzan el cielo;

horribles peces de metal recorren

las espaldas del mar, de puerto a puerto.

Yo doy todos mis versos por un hombre en paz.

Aquí tenéis, en carne y hueso, mi última voluntad. 

3 . Miguel Hernández. 

La guerra es como una hoguera

donde los locos se abrasan

Tristes guerras

si no es amor la empresa.

Tristes, tristes

Tristes armas 

si no son palabras.

Tristes, tristes.

A lo lejos tú, sintiendo

en tus brazos mi prisión

en tus brazos donde late

la libertad de los dos.

Libre soy. Siénteme libre.

Sólo por amor."