BIEN NACIDOS
Dicen, y así lo creo, que “es de bien nacidos ser agradecidos”. Pero resulta que he usado mi blog para dejar constancia de sentimientos, estados de ánimo o circunstancias no siempre positivas y creo que he dejado a un lado eso del “agradecimiento”.
Es hora, pues, de recordar, con orgullo, admiración y agradecimiento a todas aquellas personas que han estado conmigo desde que “se me cayó” el “sombrajo” de la vida encima. Me han dado la mayor y mejor prueba de afecto, pues eso y no otra cosa es quedarse al lado de uno cuando la mayor parte se desvanece y se pierde en la densa niebla del olvido y el silencio.
Dicen (y lo defiendo) que el silencio es muy elocuente. Lo sigo diciendo, pero de los que lo han guardado (silencio) ya tengo más volúmenes de elocuencia que tomos la Enciclopedia Británica. No puedo ya dejar en el mismo estante a los que me siguen acompañando.
VA POR ELLOS, con todo mi corazón. Ellos me han dado el aire y las fuerzas para seguir en la lucha diaria (dura lucha, por otra parte). A los que se han hecho evanescentes… les deseo lo mejor, pero no olviden que cada uno recibe lo que da.
Recuerdo hoy con más fuerza las duras palabras de Voltaire:
“Solo entre gente de bien puede existir la amistad, ya que la gente perversa solo tiene cómplices; la gente interesada tiene socios; la gente política tiene partidarios; la gente de la realeza tiene tiene cortesanos. Únicamente la gente buena tiene amigos”.
Yo aún tengo AMIGOS y me siento muy agradecido a todos ellos
Fotografía: "Atardecer en Soria". de Luis Fidel Mateo
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